Después de que Juan Rodríguez y su esposa Marissa Rodríguez experimentaron una dolorosa tragedia, sus gemelos fueron abandonados por su padre en un auto caliente y murieron.
Luna y Phoenix, de 1 año, se quedaron durante 8 horas después de alcanzar los 42 grados. El 19 de julio, Juan se bajó del auto sin revisar el asiento trasero, pensando que ya había enviado al niño a la guardería.
Fue al Centro Médico James J Peters VA en el Bronx, Nueva York, para realizar sus deberes como trabajador social. El padre angustiado siguió tratando de averiguar por qué era tan olvidadizo, y su esposa, a pesar del dolor, lo apoyó incondicionalmente porque sabía que lo necesitaba.
Nunca podré superar esta derrota. Sé que nunca perdonará los errores que cometió … Este es un accidente terrible, y necesito que se quede conmigo en todo momento”.
Aunque es mejor de lo que pensaba. Me duele más, pero todavía amo a mi esposo. Es un buen hombre, un gran padre y sé que nunca hará nada para dañar deliberadamente a nuestros hijos “, dijo Marissa Rodríguez. Pero su vida definitivamente no volverá a ser la misma.
Ahora Juan enfrenta dos cargos de homicidio involuntario y dos cargos de homicidio por negligencia criminal. Su padre se declaró inocente en el Tribunal Penal del Bronx y se le concedió la libertad bajo fianza tras pagar una multa de 100.000 dólares, mientras su esposa lo esperaba con lágrimas en los ojos y le brindaba todo el consuelo.
El abogado de Juan Rodríguez, Joey Jackson, explicó a los medios que toda la familia, especialmente Juan, se encuentra en un “estado de ánimo muy vulnerable” y que por este motivo ha estado bajo estricta vigilancia permanente, a debido al shock emocional que padece, podría atentar contra su vida.
Debido a que este lamentable incidente generó polémica, muchas personas criticaron el descuido de su padre, mientras que otros no lo juzgaron, porque “nunca se conoce la experiencia de todos”, salieron expertos a defender sus acciones.
El Dr. Diamond cree que Juan Rodríguez es víctima del “síndrome del bebé olvidado”, que convence a los padres de que dejan a sus hijos en guarderías, hogares o lugares seguros, pero todavía están en el asiento trasero del automóvil. “Esta condición se desencadena cuando los padres están bajo mucho estrés o fatiga, y esta condición es más común de lo que cree”, dijo Diamond.
“Desde 1998, en Estados Unidos, alrededor de 440 niños han muerto de insolación al quedar atrapados en un vehículo”, agregó. Todos los que no juzgaron a Juan están de acuerdo con este hecho, porque la muerte de sus hijos es muy dolorosa.
La pareja vive con otros dos adolescentes de 12 y 16 años, de una unión anterior de Marissa y un pequeño de 4 años, hijo de ambos.